A la hora de eliminar las verrugas de la piel, lo más recomendable es acudir al dermatólogo y evaluar lo que proponga el profesional.
Cabe destacar que, según sea el caso, las opciones de tratamiento serán unas u otras. Por ello, es importante que un especialista examine con detenimiento la zona afectada.
Por ejemplo, para las verrugas comunes, se suele indicar la aplicación de ácido salicílico; mientras que para las filiformes, se suele recomendar la extirpación con bisturí o nitrógeno líquido.
Por otra parte, cabe destacar que se suelen considerar un problema estético y que, según las estadísticas, entre un 10 y un 15 % de la población que se contagia puede llegar a desarrollar lesiones premalignas, sobre todo en genitales o laringe.
El ajo, un alimento de uso común ¿y antibiótico?
Aunque se le llegaron a atribuir propiedades antibióticas y antimicrobianas, dado su contenido en alicina, las investigaciones permitieron comprobar que para poder aprovechar estas propiedades, deben darse ciertas condiciones en el laboratorio.
Por esta razón, al colocarnos ajo sobre una verruga para eliminarla, no vamos a conseguir el efecto deseado. En cambio, sí podemos notar escozor y, según sea nuestro tipo de piel, podemos incluso experimentar irritación.
El limón, una fruta rica en vitamina C ¿y antibiótica?
Según creencias populares, el ácido cítrico del zumo de limón podría hacer que esta fruta actúe como una especie de ‘antibiótico natural’. A su vez, se cree que sus nutrientes (entre ellos, la vitamina C) ayudaría a regular el pH de la piel y así, corregir alteraciones en la misma, como las verrugas.
Aunque esta fruta sea ácida y rica en vitamina C, esto no quiere decir que actúe como un antimicrobiano o que pueda realizar algún aporte en concreto a la salud de la piel cuando se aplica directamente sobre esta.
Lo que sí está demostrado es que su consumo, dentro de una dieta equilibrada, puede ayudar a brindarle al organismo parte de los nutrientes que necesita, pero en definitiva, su uso tópico no ayuda a tratar cuestiones de las piel, como las verrugas.
Tratamiento de ajo y limón para eliminar las verrugas
Ingredientes
- 1 diente de ajo fresco.
- 1 tirita o curita.
- El zumo de ½ limón.
Preparación y aplicación
- Tritura el diente de ajo hasta obtener una pasta espesa.
- A continuación, mézclala con el jugo de limón.
- Espera un par de minutos para que ambos ingredientes reaccionen.
- Aplícalos sobre las verrugas directamente.
- Asegúrate de cubrir por completo la zona afectada con la tirita para que actúe toda la noche.
- Al día siguiente, enjuaga con abundante agua y seca bien la piel.
- Aplica cada noche hasta que desaparezca la verruga.
Sara Gómez
