Me causa mucha curiosidad como a través de las redes sociales siempre hay ciertas «indirectas» hacia los hombres, que a la final demuestra el odio que se ha creado en las mujeres en general, por las múltiples decepciones amorosas e infidelidades que pasaron en algún momento de su vida.
La mujer de hoy, está tomando tomando la actitud de «pagar con la misma moneda», es como si le dijeran al chico, si tu me la haces, yo te pago con el doble y el triple. Sin saber que con esto lo único que hace es alimentar su odio y resentimiento.
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¿Es posible perdonar una infidelidad?
A todos nos han ofendido, todos hemos llegado a experimentar ese dolor que nos causa la ofensa de la otra persona, generando rencores en nuestro corazón. Cuando nos enteramos de la infidelidad, pareciera que nuestro mundo se parte dos y la verdad es que pensar en perdonar en esos momentos es lo último que se nos pasa por la cabeza. Es más, de la misma ira y dolor que sentimos, afirmamos ¡Nunca lo perdonaré!
Pero respondiéndote a la pregunta… ¿Se puede perdonar? SI, Sólo debes decidirlo. Y es que perdonar una infidelidad no quiere decir volver a la relación, tu puedes perdonar, pero NO reconciliarte.
Razones por la que es difícil perdonar una infidelidad
1- Las altas expectativas que tenias con tu ex-pareja
Idealizamos tanto a una persona, que cuando nos traiciona y hace esa acción que jamás esperábamos, nuestro mundo se hace nada y es porque precisamente pensábamos que estábamos con el hombre perfecto. Muchas veces sucede en la etapa del enamoramiento, el cual no nos dejar ver con objetividad las señales negativas de una futura infidelidad.
2- nuestro orgullo nos ciega inmediatamente y nos llenamos de muchísimo odio. Es importante entender en este punto, que el odio se inspira en ese sentimiento de «justicia» mal interpretada: «la justicia de la crueldad» , aquella que expresa: «El que me la hace, la paga» , frases que nos motiva a vengarnos.
Recordemos que esa ley del «ojo por ojo y diente por diente», Jesucristo en su palabra nos invita a rechazarla totalmente de nuestra vida:
Ojo por ojo y diente por diente’. Pues yo
os digo que no resistáis al mal; antes bien, al que te abofetee en la mejilla derecha
ofrécele también la otra.”(Mt 5,38)
Te estarás preguntando, ¿Esto quiere decir que debo soportar y estar de acuerdo con todas las injusticias que hagan contra ti? La respuesta es NO, sencillamente Jesús, nos invita a que ni la peor injusticia debe dañar nuestro corazón, y antes de tener sed de justicia hacia nosotros, mas grande debe ser nuestro amor a quien nos ofende.
La infidelidad en el matrimonio
Puedo afirmar que es una de las experiencias mas dolorosas, sobre todo cuando son matrimonios de años e hijos de por medio. La estructura y la base de la relación: La confianza, se termina de destruir completamente.
Entonces, ¿Por qué perdonar una infidelidad en el matrimonio?
- El odio es algo terrible: Sentir al principio desprecio y odio es algo normal, el verdadero problema es alimentarlo cada día que pasa, es como si nos tomáramos un veneno esperando a que la otra persona sufra mucho más de lo que estamos sufriendo y dentro de la lógica humana es lo «justo» no?, pero hoy te digo, que el rencor es característico de las almas pequeñas, limitadas, de corazones estrechos y mezquinos. El que no perdona se envenena y se tortura a si mismo.
- En cambio, el perdón es sanador Perdonar es tomar la decisión de desprendernos de todo aquello que nos hizo daño en el pasado para vivir sanamente el presente. Perdonar no es olvida, es recordar sin rencor.
Perdonar es un don, y se hace completamente perfecto cuando la persona que lo recibe no se lo merece, entre menos lo merezca, el perdón es más perfecto.
El perdón beneficia mas a quien lo da, a quien lo recibe, la mujer que ha sentido un rencor por muchos años, sabe la carga pesada que es cargarlo quitándote todas las energías. Puedes estar viviendo un día feliz, pero con tan sólo un recuerdo o incluso llegar a ver esa persona, te roba la paz y la alegría que tenias por completo.