No se trata de tirarlo todo, sino de deshacerte de objetos o prendas de ropa que ya no usas o que no forman parte de tu vida. Es un ejercicio liberador y que también te ayudará a tomar consciencia de lo que tienes. Y si te gusta rodearte de muchas cosas, hazlo, pero que siempre al mirarlas o usarlas te hagan esbozar una sonrisa. ¡Vamos a ello!
1.
Índice
CREMAS “MALAS”
Tu piel no se merece cualquier potingue. Usa una buena crema nutritiva y adecuada a tu tez y recuerda que una buena crema no significa una crema cara.
2.
RECUERDOS DE TUS EX
Cartas, fotografías, algún que otro detalle de tu primer amor… Puede que al verlo te esboce una sonrisa. O no. Sea como fuere, forma parte del pasado y no es necesario tener una caja con recuerdos de tu ex, sobre todo si no te hace feliz y tienes pareja.
3.
REVISA TUS JOYAS Y, SOBRE TODO, LA BISUTERÍA
Llegados los 40, tal vez te apetezca lucir tus mejores joyas. Échale un ojo a la bisutería, porque determinadas piezas puede que ya no sean muy adecuadas a esa edad. O puede que sí, pero al menos que se vean de buena calidad y estén en buen estado. Si ya te has cansado, puedes dárselos a tu hija, sobrina o donarlos.
4.
BOLSOS DE MALA CALIDAD
Haz limpieza de los bolsos que has ido acumulando a lo largo de los años. Es el momento de dejar atrás todos aquellos bolsos que ya están demasiado raídos, son de mala calidad o ya no combinan con tu estilo. Mantén tus bolsos ordenados y si eres amante de estos accesorios cómprate un capricho. Pero que sea bueno, te lo mereces.
5.
APUNTES Y DOCUMENTOS ANTIGUOS
¿Aun guardas los apuntes de la carrera? Pues tal vez va siendo hora de que pasen a mejor vida. Puedes reciclar todo ese papel. Y puedes hacer lo mismo si eres de las que guardan documentos de otros trabajos anteriores que ya no te van a servir de nada. ¡Haz hueco en casa!
6.
VAQUEROS QUE YA NO TE VAN
Cierto es que en moda todo vuelve. Pero por muy “efecto boomerang” que exista, el cuerpo con la edad cambia y no hace falta ir incómoda. Por suerte, hay una gran cantidad de modelos y estilos de vaqueros para elegir el que más te guste. Y los viejos, puedes donarlos a una ONG o dejarlos en un contenedor de ropa.
7.
ROPA INTERIOR DESGASTADA
Por muy cómoda que vayas, es mejor deshacerte de esas braguitas dadas de sí y que tienes guardadas en el cajón de la ropa interior. Primero porque no te van a quedar bien, segundo porque es aconsejable renovar las prendas una vez al año como mínimo y tercero porque te mereces tener ropa interior buena y en condiciones.
8.
LIBROS ANTIGUOS
No somos partidarios de tirar libros, pero sí de donar o regalar aquellos que sepas que ya no vas a leer y que no tienen ningún valor sentimental para ti. Seguro que si les das una segunda vida, acabarán en manos de gente que estará feliz de tenerlos. ¡Sobre todo los más infantiles!
9.
COLETEROS QUE LE VAN MEJOR A TU HIJA QUE A TI
Revisa los coleteros que tienes y haz una selección. Puede que ya no los uses porque no llevas el corte de pelo adecuado, porque no van con tu nuevo estilo o porque están demasiado viejos y dados de sí. Y los que le quedarían bien a tu hija, guárdalos con sus cosas (más espacio para ti).
10.
LAS SÁBANAS DE TU PISO DE SOLTERA
Aún recuerdas la emoción de comprarte tus primeras sábanas. Pero ¿cuánto tiempo hace ya? Más de una década. Ha llegado la hora de despedirte de tu ropa de cama.
11.
ESAS TAZAS Y VAJILLA FEAS
Refleja tu estilo desde que te levantas hasta que te acuestas. Ya es hora de desayunar con una taza bonita y no con esas tazas que te comprabas cuando tenías 20 años.


